domingo, 28 de febrero de 2010

Los jesuitas en Torrejón de Ardoz. Madrid.

En el año 1118 Alfonso VIII reconquista Alcalá y su tierra, en la que se incluye la fortificación fronteriza de Torrejón.

En 1554, Torrejón compra su privilegio de villazgo y pasa a depender del arzobispado de Toledo. En 1575, Felipe II incorpora la villa al Patrimonio Real.

En Torrejón de Ardoz, el Colegio Imperial de la compañçia de Jesús en Madrid centra su actividad agrícola y ganadera entorno a la conocida como Casa Grande. Se trata de una hacienda Real Hacienda de más de 2.000 hectáreas. Fundada en el siglo XVI por la emperatriz María de Austria, 1528 - 1603, hija de Carlos I, hermana de Felipe II, y esposa de Maximiliano II de Habsburgo. Puede que su fundación se basase sobre una anterior del siglo XV. Sería encomendada a los jesuitas para su explotación.

Actualmente esta construcción ejemplo de casa agricola de los siglos XVI y XVII centro de una explotación agraria se encuentra en pleno núcleo urbano de Torrejón de Ardoz.

Fue posesion de los jesuitas hasta 1767 cuando son expulsados de España y de Nápoles, acusados de instigar el motín de Esquilache. Además se les acusa de servir a la curia romana en detrimento de las prerrogativas regias por el cuarto voto de la Orden que aseguraba la obediencia al Papa.


"Don Carlos, por la gracia de Dios, rey de Castilla, &c.:

Sabed: Que habiéndome conformado con el parecer de mi Consejo real, en el extraordinario que se celebró, con motivo de las resultas de las ocurrencias pasadas (los motines, sediciones y tumultos de Madrid, Cuenca, Azcoitia, Zaragoza y otras poblaciones de Aragón, Navarra y Andalucía), en consulta de 29 de Enero próximo pasado, y de lo que sobre ella, conviniendo en el dictamen, me han expuesto personas del más elevado carácter y acreditada experiencia; estimulado de gravísimas causas, relativas a la obligación en que me hallo constituido de mantener en subordinación, tranquilidad y justicia a mis pueblos, y otras urgentes, justas y necesarias, que reservo en mi real ánimo:

Usando de la suprema autoridad económica que el Todopoderoso ha depositado en mis manos, para la protección de mis vasallos y respeto de mi corona, he venido en mandar extrañar de mis dominios de España, Indias, e islas Filipinas, y demás adyacentes, a los regulares de la Compañía, así sacerdotes como coadjutores o legos, que hayan hecho la primera profesión, y a los novicios que quisieran seguirles; y que se ocupen todas las temporalidades de la Compañía en mis dominios; y para su ejecución uniforme en todos ellos, he dado plena y privativa comisión y autoridad al conde de Aranda, presidente de Consejo, con facultad de proceder desde luego a tomar las facultades correspondientes."


Tras la expulsión de los jesuitas por Carlos III, sus posesiones pasan al Patrimonio Real, salen a pública subasta en y la compra Juan de Aguirre, vecino de Madrid. En 1805, compra la propiedad en pública y judicial subasta Juan Domingo Pignatelli de Aragón, de los condes de Fuentes y marqueses de Mora así como de los condes de Solferino, y su esposa María Trinidad Wall y Manrique de Lara. Durante el reinado de Fernando VII retorna a la Compañia de Jesús, pero por una Real Orden de 1833 vuelve a poder de los Pignatelli de Aragón para pasar, en 1835 definitivamente a su anterior propietaria la viuda de Pignatelli, condesa de Fuentes. En 1902 la vende José Rodriguez Sedano Lasuén, director de la Casa de la Moneda durante 25 años, que la convirtió en la mejor explotación agrícola y ganadera de la Meseta Castellana, por lo que el gobierno concedió a La Casa Grande la denominación de "Granja Modelo". Su viuda la vende a una compañia agropecuaria que la utiliza como vaquería. Durante la Guerra Civil sufre grandes daños. Terminada la Guerra en 1939, en 1940 es vendida una empresa agropecuaria. Se acrecienta su ruina. Fue por un tiempo Casa Cuartel de la Guardia Civil. En 1973 se declara su ruina y tiene que ser desalojada por la Guardia Civil. En este mismo año y al poco tiempo de su desalojo la compra Rafael Onieva Ariza, industrial cordobés- ROA. Procoinsa-Promotores inmobialiarios Constructores-, que comenzó su reconstrucción destinándola a su actividad actual.

Era Maria Trinidad Wall hija de Eduardo Wall y Porcel y de
María de la Concepción Manrique de Lara y Mayoral, III condesa de Armíldez de Toledo.


Eduardo Wall y Porcel es primo de Ricardeo WALL que muere en los últimos días de 1777. Su testamento será fuente de polémica ya que en él favorece claramente a su confesor, Juan Miguel Kayser, quien se lo había arrancado prácticamente en el lecho de muerte. Su familiar más cercano, su primo, Eduardo Wall, y el propio confesor, pleitearán algunos años por él.

Wall no dejó descendencia, pero su primo, Eduardo, emparentará con la marquesa de Armíldez de Toledo. Su descendencia hará lo propio con las casas de Fuentes, de Cañada y, ya en el siglo XIX, de Floridablanca.

Ricardo Wall y Devreux. Nace en 1694 y muere en 1777. General, diplomático-supo introducir a España en el nuevo concierto de las naciones- y ministro de origen irlandés al servicio de España en los reinados de Felipe V, Fernando VI y Carlos III. En sus últimos años se ocupa de dirigir la restauración de La Alhambra, entre 1769 y 1772, y para supervisar las Nuevas Poblaciones de Pablo de Olavide en Sierra Morena en 1769.

Durante el siglo XVIII y parte del XIX, La Alhambra cayó en el olvido y sus salones y cuartos fueron utilizados como bares y establos. En las primeras décadas del siglo XVIII, Felipe V desposee de la alcaldía de la Alhambra a los títulares de la Casa de Tendilla y Mondejar, comenzando una etapa de abandono prácticamente hasta el reinado de Carlos IV. Las tropas napoleónicas que ocuparon Granada desde 1808 hasta 1812, convirtieron los palacios en cuarteles militares. Durante una retirada, minaron las torres y destruyeron parte de ellas. Dos de ellas, la Torre de Siete Suelos y la Torre de Agua quedaron en ruinas. Y de esta manera, este abandono increíble continuó hasta 1870 cuando la Alhambra fue declarada monumento nacional.

Fernando " el Católico" nombra a ÍÑIGO LÓPEZ DE MENDOZA Y QUIÑONES, II CONDE DE TENDILLA y I Marqués de Mondejar, conocido como "El Gran Tendilla", primer Alcaide de la recién conquistada Alhambra de Granada. Lo sería casi veinticuatro años y sus sucesores fueron también Alcaides vitalicios con poder efectivo dos generaciones más, y Capitán General de Granada. De hecho el Rey Fernando le pasó las llaves de la fortaleza en la ceremonia de rendición, tras recibirlas de Boabdil el 2 de enero de 1492. La leyenda cuenta que Boabdil le regaló su anillo, que se perdió en Málaga en el siglo XVII al morir allí el octavo conde de Tendilla. Íñigo se instaló en el palacio de Yusuf III de la Alhambra, dentro del conjunto del Partal, palacio tan grande como el de la Torre de Comares y el Patio de los Arrayanes, con torre y estanque. El Palacio fue destruido en el siglo XVIII.

ARMILDEZ DE TOLEDO, I conde en 1789 Jerónimo Manrique de Lara y Toledo. Es ahora José María Castillejo y de Oriol. José Maria Castillejo Oriol, actual, conde de Floridablanca marqués de Aldama y conde de Armildez de Toledo entre otros títulos. Es hijo de Juan Castillejo Ussia, heredero de todos los anteriores linajes, y de Maria de Oriol e Ybarra, perteneciente a una familia de conocidos empresarios vascos y andaluces.

El condado de Floridablanca, Murcia, ciudad de lugar de nacimiento de su primer titular fue creado por Carlos III en 1773 a favor de José Moñino y Redondo.

  • José Moñino y Redondo, I conde de Floridablanca;
  • Vicenta Moñino y Pontejos, II condesa de Floridablanca;
  • José María Castillejo y Moñino, III conde Floridablanca;
  • Juan Bautista de Castillejo y Sánchez Teruel, IV conde de Floridablanca;
  • José María de Castillejo y Wall, V conde de Floridablanca;
  • Juan Bautista de Castillejo y Ussia, VI conde de Floridablanca, duque de San Miguel;
Es como hemos visto José María Castillejo y de Oriol, entre otros títulos, el VII conde de Floridablanca.

Francisco Moñino y Redondo, 1742-1808, hijo de José Moñino Gómez y de Francisca Redondo Bermejo, hermano de José Antonio Nolasco Moñino y Redondo, 1728-1808, conde de Floridablanca. El hermano del conde de Floridablanca casa con
María Ana Moñino y Pontejos, IV marquesa de Casa Pontejos. Padres de
  • José María Castillejo y Moñino, III conde Floridablanca que casa con María de los Dolores Sánchez de Teruel y Ansioti, VIII condesa de Villa Amena de Cozbijar, y de
  • Vicenta Moñino y Pontejos, II condesa de Floridablanca que casa con Manuel de Pando Fernández de Pineda, marqués de Miraflores.
Los III condes de Floridablanca son padres de Juan Bautista de Castillejo y Sanchez Teruel, IV conde de Floridablanca, 1860 -1919. Casa con María de la Concepcion Wall y Alfonso de Sousa de Portugal, XIV marquesa de Guadalcazar, hija de Isidro Wall y Alfonso de Sousa de Portugal, VI conde de Armildez de Toledo y de María Luisa Diago y Tirry, VIII marquesa de Cañada. Padres de José Maria de Castillejo y Wall, V conde de Floridablanca que casa con María del Pilar Ussia y Diez de Ulzurrum, III marquesa de Aldama. Padres de,
  • Juan Bautista de Castillejo y Ussia, VI conde de Floridablanca, duque de San Miguel, que casa con Maria de Oriol Ybarra.
  • Alfonso Castillejo y de Ussia, marqués de Aldama, que casa con Casilda Fernández de Cordoba y Rey, XIX duquesa de Cardona, hija de Luis Jesús Fernández de Cordoba y Salabert, XVII duque de Medinaceli y de su tercera mujer María de la Concepción Rey y de Pablo Blanco. Era, muere en 1998, la XIX duquesa de Cardona hermana de padre de la actual titular de la Casa de Medinaceli. Sin sucesión de su primer matrimonio casa la XIX duquesa de Cardona con Antonio Guerrero Burgos. Padres de la XX y actual titular del marquesado de Cardona.
Los VI condes de Flordablanca y duques de San Miguel son padres del actual títular José Maria Castillejo y de Oriol, VII conde de Floridablanca, casado con Ana María Chico de Guzman y March, de los VI duques de Ahumada. Con sucesión.

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